Empieza el año: H. sufre una embolia. Un susto enorme para toda la familia. 2 señamas de hospital
Finales de enero: me llama I. con mucho susto: su padre está siendo operado de urgencia de digestivo. Operación quirúrgica muy peligrosa, varias semanas de hospital, cambio radical de vida.
Marzo: el opel agila, después de 4 años de irregular servicio, rinde final de trayecto e el km 15. de la AP-68
Mayo: A. ingresado en el hospital por peritonitis. Con el agravante de que, en las tres semanas que duró la hospitalización, se perdió la primera comunión de su primogénito.
Agosto: fallece el padre de D.
Septiembre: la jefa se queda sin trabajo. Con lo que ello supone par la economía familiar.
También septiembre: P. Sufre un grave episodio de desorientación que le lleva al hospital.
Octubre: P. de nuevo, en una revisión cardiológica programada tras las semanas de hospitalización anterior, sufre un infarto. De lo malo malo, en el mejor de los sitios posibles par tenerlo: la consulta del cardiologo. De nuevo, dos semanas hospitalizado.
Noviembre: la jefa, durante un viaje a VLC, sufre severa hinchazón en la pierna, y le detectan un trmbo. Larga hospitalización con el agravante de estar a 700 km. de casa.
Si sumamos que los trabajos de I. y J.N. también están en la cuerda floja, los problemas de salud de la compañera luna, los sinsabores del asociacionismo, y la presion laboral que generan las nuevas legislaciones, el resultado es desolador.
Quiero celebrar la nochevieja el 15 de noviembre para ver si así termina antes el año, y con él las desgracias... aunque, siendo sincero, miedo me da publicar esta lista. Porque siempre hay margen para empeorar, y aun quedan casi 2 meses de año.
1 comentario:
chin chin!! yo celebro contigo el fin de año YA!!! me sumo al "annus horribilis"...y mejor no enumero por si tentamos al diablo. besos a pares!!
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