Crónica del viaje

Antes de las 9:15 los asistentes empezamos a juntarnos en el vestíbulo de Concordia: teníamos ganas de poder subir a los andenes, para ver cómo quedaba una locomotora 1500 en Concordia, cosa poco habitual.


Una vez en el tren, hay que efectuar las labores de intervención necesarias para el buen funcionamiento de los viajes de estas características...


Pasada toda la zona de cercanías, empezamos la subida del puerto, la parte más chula del viaje. Efectuamos una breve parada en Cadagua para sacar alguna foto...



Al culminar el Cabrio, los cruces con los 'reporteros gráficos' que perseguían al tren van siendo más habituales. Por ejemplo, Josu Vega nos saca una foto que comparte en Flickr.

Finalmente llegamos a Sotoscueva, donde, bajo un cielo plomizo, se realizan las maniobras para cambiar de lado la locomotora, y proceder a bajar el puerto. Unas pocas imágenes...


Completada la maniobra, los asistentes al viaje posamos para una foto de grupo, y, tras el tradicional cántico, nos disponemos a bajar el puerto de nuevo.



El valle de Mena nos ofrece unas panorámicas otoñales muy coloridas...


Breve parada a la bajada, en el apeadero de La Silla, donde de nuevo inmortalizamos el tren...



Y así, compartiendo un refrigerio en el tren, en buena compañía, llegamos hasta Balmaseda, donde tuvimos oportunidad de realizar una rápida visita a los depósitos y talleres, antes de desplazarnos hasta la fábrica de boinas "La Encartada", donde degustamos una tradicional putxera ferroviaria. Qué cantidad de alubias pudimos comer!! Y qué buenas!!

Antes de volver a montar en el tren para regresar, muy contentos pero ya cansados por todas las actividades del día, a Bilbao, un corto recorrido en bus nos acercó hasta Torre Loizaga, donde pudimos contemplar la colección de automóviles clásicos allí albergada.

Puntualmente, a las 8 de la tarde, dimos por finalizado el viaje en la estación de Concordia. Se hacen las últimas maniobras en la oscuridad que implica la noche cerrada del otoño...


Y yo no quiero dar por terminado este escrito sin agradecer, por un lado, a todos los socios de AAFB y acompañantes que con su asistencia hicieron posible que este viaje se pudiera realizar, y, sobre todo, a todo el personal de feve que nos atendió durante todo el día. Gracias a vosotros pasamos un día estupendo, y esperamos que para vosotros también fuera agradable.

Muchas gracias!!

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