La verdad es que cuando la cosa se complica...
ayer, después de 3 días de muy buen tiempo, saqué tiempo para andar un poquito. Aproveché para, por un lado, hacer el recorrido, y por otro, probar la funcionalidad de un servicio que hacía tiempo había visto en el Nokia sports tracker: compartir la ubicación on-line en directo. La almacena, y presenta después unos cuantos datos:
Pero en ese recorrido, las cosas no fueron bien, no.
Lo primero, por no dominar el software, sólo se guardó la mitad de la ruta. Evidentemente, no salí, como parece por el mapa, de un punto indeterminado de la Avenida de Montevideo. Lo segundo, porque, como ya me pasó en Marzo, al llegar a Zorroza se puso a llover. La diferencia, en este caso, era que el viento de galerna llevaba ya un rato, y la jefa pudo avisarme con algo de antelación de que la tormenta bajaba por el valle del Kadagua. Así que pude meterme a tiempo en el Polideportivo de Zorroza hasta que me vino a buscar. No pude andar todo el rato que quería, pero al menos no me mojé.
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1 comentario:
En los GPS, llevo ya muchos años diciendo, lo importante es saber cuándo no hay que hacerles caso ;)
Pero lo del mapa es peligroso. El domingo, volviendo de Asturias, vimos a un tío conduciendo una furgoneta por la A67, con un mapa desplegado en el volante, y concentrado en él, en lugar de en la carretera. Eso tampoco es bueno.
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