Alguna vez he utilizado el servicio de préstamo de bicicletas de Bilbao. Y estaba muy contento con él: era un servicio sencillo, cercano y humano. Ibas donde las personas encargadas en oficinas de turismo, polideportivos o centros de distrito, y cogías la bici, hasta devolverla en un punto de entrega. Gratis, sencillo, y generando empleo. No como en Getxo, en que, como ya tuvimos ocasión de experimentar, había un servicio automático, muy moderno, muy cool, pero que, lo primero, era de pago, lo segundo, funcionaba peor, y, lo tercero, era mucho menos humano.
Pues bien, en Bilbao ya se ha gastado una millonada en montar un servicio automático. En mi opinión, sin necesidad, porque funcionaba muy bien el que había manual.
Comentándolo con un compañero, decía que alguna ventaja tenía que tener. Yo creo que no: el anterior era gratuito, y este es de pago (más concretamente, va a empezar a serlo en octubre). El anterior era sencillo, humano, y mantenía puestos de trabajo, y este menos. El anterior ya estaba montado y funcionando, y este ha requerido gastarse un pastizal de dinero público. Vamos, que no veo ninguna ventaja.
"Bueno", argumentaba mi compañero... "Al ser automático podrá utilizarse las 24 horas del día, que ahora solo se puede usar mientras están abiertos los centros de distrito". Pues ojala, porque sería al menos una ventaja... pero ni eso: como se ve en la foto, el horario es de 7:45 a 21:30.
Y, para colmo, me informan en el 010 de que ya han mandado las cartas a los usuarios del servicio antiguo para apuntarse al nuevo... y las nuestras no han llegado. Extraño. Muy extraño.
Entiendo que, en tiempos de crisis, está bien que el dinero público se use para activar la inversión, y así, por el mismo precio que te gastarías en pagar subsidios sin ninguna contrapartida, obtienes un beneficio para los ciudadanos, o unas infraestructuras para ser más competitivo. Pero gastar un pastón de dinero público, en tiempos de crisis, para llegar a un sistema que no aporta ninguna ventaja con respecto al anterior, y sí muchos inconvenientes, no veo por dónde cogerlo.
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1 comentario:
Me das una mala noticia.
El servicio era mejorable, pero muy bueno. A mí me tuvieron un mes sin préstamo, porque en uno de los centros, el de Cortes, no se enteraban demasiado bien y no apuntaron mi devolución hasta dos días más tarde. Le faltaba un horario más extenso, cubrir algunas zonas de la ciudad y algo de flexibilidad. Pero hacerlo de pago y con maquinitas me parece un error.
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