“En este mundo traidor.
nada es verdad ni mentira.
todo es según el color.
del cristal con que se mira”.
(Ramón de Campoamor, 1817-1901
Hoy, una de trenes. Y, más allá, de apreciaciones subjetivas sobre trenes.
Cuando, el los principios del siglo XXI, se van creando nuevas lineas de Alta Velocidad en España, y, con razonable visión de futuro, estas se realizan con el ancho de vía estándar europeo, y no el más ancho ibérico, evitando perpetuar aun más el error Subercase (otros lo llaman informe), se vio que, aunque el nuevo ancho se llevara a las capitales donde más tráfico se iba a generar (Barcelona, Sevilla, Málaga, Valencia, Valladolid...), para poder llegar a otras, o incluso mientras las obras hacia éstas duraban, era necesario poder entrar a las vías más antiguas, más anchas. Y, para eso, se contrataron trenes con cambio de ancho. Concretamente, los de la serie 120 y los de al serie 130.
En Bilbao, además, se ha dado la feliz coincidencia que tenemos los dos. Para ir a Madrid el 130, y para ir a Barcelona el 120. El primero accede a la vías de Alta Velocidad y ancho europeo en Valladolid, y el segundo en Zaragoza. Así que, por ese motivo, he tenido oportunidad de probar con cierta frecuencia ambos. Y mi veredicto es que son trenes muy parecidos: Planteados poco más o menos al mismo tiempo, con unos estándares de confort prácticamente iguales, unos criterios técnicos también muy parecidos (igual velocidad punta, cambio de ancho... )
La diferencia más relevante es que el 120 tiene menos plazas, y, como aparentemente, los Alvia del Norte no acaban de llenarse, pues Renfe está planteando cambiar los 130, con más plazas, por los 120, con menos.
Siendo los trenes muy parecidos, me parecen muy curiosos los artículos que se publicaron al respecto, por un lado, en La Nueva España - poniendo a parir a los 120 y dejando caer, poco menos, que era una afrenta para Asturias que quitaran los 130 para poner esos - y por otro, en El Diario Montañés - poniendo a parir a los 130 y dejando caer que era una maravilla que pusieran esos trenes tan modernos quitando los mas antiguos y peor dotados 130-. Vamos, el mismo hecho, interpretándolo de manera absolutamente contraria. Y, evidentemente, mezclando información con valoración, tanto en un sentido como en otro.
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2 comentarios:
Yo creo que hay un cierto victimismo en los artículos.
Estoy de acuerdo. Digamos que el primero tiene mucho, y el segundo se pasa hacia el lado contrario.
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