El artículo de Jon Uriarte "Bilbaínos con Diptongo" de este lunes me ha recordado una iniciativa de la que hace tiempo quería comentar algo: el Banco de Recuerdos. Una serie de recuerdos -frases, fotos, videos- que la gente guarda. Con la idea de que, si algún día, el Alzéimer ataca, tengamos algo que recordar, algo que revivir, cuando nuestra propia memoria no nos lo pueda dar.
Aunque voy a participar (con una frase sobre mi primer recuerdo, y una foto que ya puse aquí), no puedo negar que tengo suerte, ya que tengo mi propio banco de recuerdos. Que está aquí. Releyendo las entradas del blog, puedo revivir lo que ha sido mi vida en los últimos tres años. Y espero poder seguir haciéndolo durante mucho tiempo. Tanto escribiéndolo, como recordándolo.
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Aunque voy a participar (con una frase sobre mi primer recuerdo, y una foto que ya puse aquí), no puedo negar que tengo suerte, ya que tengo mi propio banco de recuerdos. Que está aquí. Releyendo las entradas del blog, puedo revivir lo que ha sido mi vida en los últimos tres años. Y espero poder seguir haciéndolo durante mucho tiempo. Tanto escribiéndolo, como recordándolo.
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