Bueno, pues aunque a punto estuvimos de no poder llegar, y de hecho, por el mismo motivo, en parte nos arrepentimos de haber ido, pero... bueno, que nos quiten lo "bailao".
El primer día, como casi siempre, para los traslados y una primera toma de contacto.
Bajar del avión en la terminal 3 de Heathrow, pasar el control biométrico de pasaportes, y derechitos al metro. Cargamos la Oyster que nos habían dejado (Gracias!!)... solo la mitad de lo que habíamos calculado. Ya habrá tiempo de cargar más si es necesario. Y nos metemos en la Picadilly Line. En el extrarradio no, pero según nos vamos acercando al centro... se abarrota! Después, cambiamos a la Jubilee hasta llegar a London Bridge. Junto al hotel.
La estación de London Bridge esta ubicada al sur del Támesis, junto al puente del que coge el nombre, puente que comunica con el corazón de la City, la conocidísima parte de negocios.
La casualidad quiso que según bajamos del metro , y decidimos acercarnos al puente para empaparnos del ambiente y ver por primera vez el Tower Bridge, coincidió con la hora de salida del trabajo mayoritaria de la City. Era impresionante ver las hordas de personas trajeadas cruzando el puente para salir del trabajo!.
En el hotel nos estaba esperando una bandeja con un gran surtido de cafés y tés. Una idea perfecta para relajarse y prepararse, ya que la que nos esperaba al día siguiente iba a ser intensa...
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1 comentario:
Espero que los esfuerzos para conseguir ese hotel y el viaje os merezcan la pena, disfrutar y ya irás contando.
Saltos y brincos
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